Bend, Oregón, EE.UU.«La guerra nunca cambia»Lo que sí cambia es la forma en la que libramos nuestras guerras pues corriendo el año 2070 en Bend, lo que algún día fue la cabecera del condado de Deschutes en el estado de Oregón, EE.UU., los ejércitos han sido sustituidos por hordas de no muertos y las viejas batallas han dejado su huella con la radiación que impregna la ahora yerma y desolada tierra.

Muy pocos son los sobrevivientes y muchos son los peligros que acechan más allá de los muros de sus comunidades, pero la guerra nunca cambia y la humanidad planta cara para perder lo único que les queda: la supervivencia.